¿Quién era yo antes de olvidar quien soy ahora?

23.9.08

El color que cayó del espacio

Hay un cuento que puede ser catálogado dentro del género de terror fantástico o terror cósmico, dicho cuento es el de "El color que cayó del espacio" del buenazo de Howard Phillipe Lovecraft. No hace falta que entré en detalles, sólo basta decir que es un cuento bastante bueno, excelente diría yo, el mejor que leido del género y aquel que ya lo haya leido estará de acuerdo conmigo en mi primera afirmación. He elegido dicho nombre para este blog... ja ja ja, este comienzo de blog que no sé sí alguien alguna vez vaya a leer, pero he elegido este nombre porque yo soy uno de esos tipos que le gusta imaginar las cosas que no existen. Eso de decir que no existen es una mera manera de nombrar algo de lo que no se es consciente, otra manera sería decir, las cosas que existen de las cuales no somos concientes. Ah ja ja ja ja ¿y que tiene que ver el nombre del blog con las cosas que no existen? Pues el que haya leido el cuento me entenderá, ja. Bueno, trataré de explicarlo. Imaginar algo que no existe parece imposible, y esa es una pregunta que siempre me he hecho ¿podemos realmente imaginar algo de lo cual previamente no tengamos experiencia? Sé que puede ser una pregunta o un caso muy trillado (para algunos, ja) pero lo utilizaré porque es lo que solía preguntar a mis amigos cuando mi espíritu no estaba tan degradado como ahora, cuando estaba más despierto: Imagina que nunca, desde que naciste has tenido contacto con el color rojo, imagina que, sin embargo, aunque nunca hayas visto el color rojo, el color rojo existe. Ahora imagina que en ese supuesto yo te digo, ¡imagina un color que nunca hayas visto! No puedes imaginar concretamente el color rojo, puesto que no has tenido experiencia de él, pero puedes conceptualizar e imaginar que efectivamente puede existir un color del cual no tengas conciencia. El color rojo existirá entonces como noción, en ese entonces estamos posibilitando la percepción del color rojo, es posible que comiences a vislumbrarlo, el punto es que regularmente ya no solemos imaginar, de este modo ¿cómo podemos llegar a percibir cosas que están más allá de nuestra realidad sensible? No sé sí estoy siendo del todo coherente, pero no importa, ya agarré vuelo, je. Recuerdo también que en la primaria, no recuerdo el grado, en uno de esos libros de texto gratuito donde venían pequeños textos o fragmentos, venía uno muy pequeñito acerca de una niña que volaba un papalote, creo, luego llegaba una especie de niño con una mochila muy extraña, había una conversación entre la niña y el niño y resultaba que el niño era un niño extraterrestre. Creo que la niña le enseñaba al niño acerca de la tierra y volar cometa, y creo que el niño le hablaba o enseñaba a la niña algo sobre un color muy extraño, un color al cual le nombraba de alguna manera, este color era un color que no existía en la tierra. Desde que leí aquella lectura quedé maravillado ante tal idea, eso aplicaba no sólo a colores, sino a todo... TODO. Colores espaciales significa para mí, lo que puede existir que no sabremos nunca, significa lo que existe que no conocemos, incluso aquello de lo que tenemos noción y no existe, pero que al pensarlo lo creamos. Esa es mi principal duda, ¿somos capaces de crear o sólo imitamos siempre pobremente a la naturaleza? Yo no soy ateo, ni religioso ni nada de eso, mi concepción de la religión es más bien filosófica al igual que el concepto de Dios, pero para aquellos que dicen que el hombre ha creado a Dios y no Dios al hombre, ¿no les parece la invención de más extraordinarias cualidades? Es decir, Dios es eterno sin que el hombre pueda extraer las nociones de lo eterno de ningún lado empiricamente hablando, Dios es omiciente sin que el hombre pueda tener la noción real de la omniciencia, es omnipotente sin que el hombre pueda nombrar alguna otra cosa donde se manifieste esa cualidad, el punto es. Sí Dios es una creación del hombre, ¿no podemos del mismo modo crear otras cosas maravillosas? No podemos entonces crear nuestra propia realidad. Tal vez Dios existió o fue creado realmente a fuerza de se contado una y otra y otra y otra y otra vez... y luego Dios nos creo a nosotros. Ya no sé que tenga que ver Dios con los colores espaciales, o bueno sí, tiene que ver con eso de lo que podemos y no podemos imaginar y lo que existe y lo que no existe o lo que puede existir, y de si somos los humanos realmente capaces de crear o simplemente imitar. Vaya, creí que esta primer entrada sería algo un poco más sencillo, pero ya veo que no, no quisiera terminar esto sin aclarar del todo las ideas, pero bueno, creo que de eso se irá tratando todo esto. De cierto modo comienzo este blog no tanto por el afán de que me lean otras personas, sino más bien porque soy un tipo más o menos disperso, ja ja ja... ¡bien disperso! Y además siempre me ha gustado escribir, no me gusta la idea de un diario, un diario se me hace muy de niñas, ah ha ha. Naa, más bien un diario es algo de cierto modo egoista, a mi me gusta leerme pero me gusta ser reinventado en cada lectura que alguien más hace de mi. Así que si escribo esto para no dejar pasar mis ideas, o como un motivador a escribir y ordenar mis ideas y además hay algunas personas que puedan leerme y ayudarme a esa reconstrucción infinita de mi mismo estaré más que satisfecho.

No hay comentarios:

Powered By Blogger
Mi foto
El espacio, Velkrón
Anárquicoutópiconihilistadispersomistiscifilosóficomalabaricuentista... a veces.

MusicPlaylistView Profile
Create a playlist at MixPod.com